Movimientos y ángulos

Movimientos y ángulos

Pero, ¿Encaja esta teoría con la figura humana?

Si la representamos tumbada. Está muerta o dormida. 0 grados es la nada. El descanso total sobre el horizonte.

90 grados es la vida. Una figura en vertical, nos dice que está viva o lo aparenta. La oposición total a la gravedad. Pero no es más. No hay acción. Tenemos una figura viva, que no es poco, pero sin hacer nada. Hay un equilibrio entre la vertical de la vida y la horizontal del descanso fugaz o eterno.

Si queremos que haga algo, ese equilibrio se tiene que romper. Y se rompe creando fuerzas que mueven las partes del cuerpo en diagonales. Las diagonales son la acción.

Para empezar a andar, el cuerpo romperá la vertical lo suficiente para obligar a los pies a cambiar la posición para no caer contra el suelo. Cualquier ángulo representa un desequilibrio insostenible. Es una posición imposible. El lector será consciente de que es una imagen que representa un momento único y concreto. Algo que no puede perdurar en el tiempo. Esa acción tiene por fuerza que variar. Tendrá un movimiento de un punto a otro. Es una posición en evolución hacia otra. Así, mientras el cuerpo coja esos pocos grados, necesitará el movimiento de pies para mantenerse sin caer. Conforme adquiera más grados, necesitará de un desplazamiento más rápido de las piernas. Cuanto más próximo a 0º sea el ángulo, más rápido será el movimiento.

Siguiendo el ejemplo de la tipografía, esta podría ser la razón por la que para representar situaciones que tienen que ver con la acción o el deporte, se suelen elegir tipografías inclinadas.